Cómo construí mi primer ordenador y no perdí demasiado la cabeza: Parte 2

También conocido como “pulso de hierro”

Como pedimos las piezas por internet, el ordenador llegó en dos partes: una con la caja, y otra con la tarjeta gráfica, el power supply, la memoria RAM, la placa madre y el chip. Se me pusieron los ovarios de corbata cuando vimos que la segunda caja, que contenía todo lo jodidamente caro y delicado, estaba tal que así:

Los de correos habían abierto la caja y al hacerlo, también le hicieron un rajote a la caja de la fuente de alimentación. Intenté no pensar en ello y sacamos todo para ponernos al lío en una mesa grande y limpia.

La primera parte de montar un PC para mí es la que más asusta y para la que necesitas por lo menos una mano que te ayude: colocar el chip en la placa madre y el ventilador, que va pegado al chip y según el que hayas comprado (AMD o Intel) y la placa madre que tengas, el ventilador se coloca de una forma u otra. Son universales asi que suelen venir piezas sobrantes que normalmente son para otro tipo de chip.

Una vez se montan los pies del ventilador colocamos el chip. Las pegatinas y las tapas de cualquiera de cualquiera de estos dos no se quitan hasta el último momento. El chip en ningún momento se empuja ni se fuerza para colocarlo, se deja caer con mucho cuidado en su sitio, y en cuanto esté colocado y asegurado con la tapa, se coloca el ventilador. Como hay que pegarlo con la masilla, hay que moverlo lo menos posible para que ésta no se esparza por los lados del chip y atornillar el ventilador por la parte de atrás de la placa madre. (debería estar todo bien explicado en las instrucciones). Esta parte es la más difícil, y acojona más que el bautizo de un Gremmling, así que por favor, POR FAVOR, hazlo con ayuda, porque cagarla es muy fácil y puede joder absolutamente todo. No olvidés buscar qué instrucciones son las que debéis seguir según el tipo de placa madre y de chip (en éste caso era 1150, que eran las mismas que con el 1155).

La placa madre con el chip y el ventilador montados ya asegurada en la caja.

Una vez hecho eso, y atornillada la placa madre dentro de la caja, hay que empezar a encajar las piezas, siguiendo un poco el orden que te parezca.

En cuanto a la RAM, es importante saber que si vas a colocar más de una tienes que encajarlas intercaladas y no seguidas, es decir, con cuatro slots por ejemplo, colocarías tus memorias en la primera ranura y en la tercera, en lugar de ponerlas seguidas.

Las memorias RAM ya encajadas en los slots. Me encanta que sean rojas :D

El rollo de todo ésto a partir de aquí es conectar los cables una vez pongas la fuente de alimentación, pero si te fijas bien todos están nombrados y numerados de la misma forma que la placa madre para que sea más sencillo. Además, si puedes pasar los cables por detrás de la caja, como en éste caso, tardarás bastante más, pero todo quedará ordenado y bonito, además de que el flujo de aire mejora muchísimo cuando no hay una maraña de cables de por medio. Siempre sobran bastantes cables de la fuente de alimentación, pero sólo porque vienen preparadas para ordenadores con distintos tipos de sistemas de enfriamiento, tarjetas gráficas o placas madre, y para gente que quiere añadir más ventiladores u otras tarjetas gráficas.

La parte trasera de la caja -sin tapa- con todos los cables ordenados.

Ahora viene cuando la cagamos. Encendimos el ordenador y metimos nuestro CD de sistema operativo. Cuando se estaba instalando, mi marido movió la torre y accidentalmente pulsó el botón de reseteo, y a partir de ahí el ordenador se encendía y se apagaba solo sin ningún tipo de control. Nos dijeron que se habría vuelto loco porque la instalación del sistema operativo se había quedado a medias, así que la solución era sacar el disco duro interno, conectarlo a otro ordenador, y formatearlo. Cuando volvimos a conectarlo a mi ordenador el disco duro había creado una partición de casi 1TB y cuando inició Windows ese tera había desaparecido. Por suerte fuimos a Fry's donde lo compramos y nos cambiaron el disco duro por otro igual.

A todo esto, cuando todo estaba hecho y nos dispusimos a cerrar la caja por la parte de atrás, el ordenador volvió a apagarse solo y empezó a comportarse igual que antes. Tocando aquí y allá descrubrimos que uno de los cables del power supply estaba mal soldado, porque al tocarlo lo más mínimo, el ordenador se apagaba.

Tengo la ligera sospecha de que correos (o la compañia que Newegg utilizó para enviarnos los paquetes), trató mi envío como el culo, y puede ser que la fuente de alimentación haya llegado jodida por su culpa. La caja (como enseñé más arriba), estaba abierta y los de correos la debieron de abrir con un cuchillo jamonero, porque la caja de la fuente de alimentación tenía un rajote bien hermoso. Así que ahora mismo, sin tocar mucho la torre, estoy usando el ordenador y esperando a que me envíen otro power supply.

Lo siento, las fotos son un poco cacota, pero la luz en mi casa es horrible y aún no tengo photoshop para arreglar en color verdoso tan feo que dan los fluorescentes del salón.

Y para terminar, me puse a instalar juegos y pensé: ¿Cuál es el más bruto que tengo ahora mismo? El nuevo Tomb Raider. Y tengo que decir que va como un tiro.

Captura de pantalla del juego, ¡ay, pobre Lara!

Y ésto sin haber metido las mejoras que la propia tarjeta gráfica te proporciona, que para juegos un poco más antiguos puede dar muy buenos cambios en calidad de antialiasing.
¡Y aquí concluye mi aventurilla! Espero poder obtener DayZ en algún momento próximo y pueda subir algún que otro gameplay, porque la verdad es que empieza a picarme el gusanillo :D